Volvió a la titularidad y de que manera. Partidazo y MVP sin dudarlo de un enorme Raúl Jerez, que gracias a sus intervenciones propició que Jimbee Cartagena se alzara con otro triunfo frente a Burela en la vuelta del fútbol sala al Palacio. Solano y Waltinho hicieron doblete y Avellino volvió a cuajar muy buenos minutos con gol incluido.
El encuentro comenzó movidito y ambos conjuntos pudieron adelantarse a las primeras de cambio. Los meloneros fueron los primeros en generar peligro en el primer balón que tocaban. Franklin se movió hacia el centro entre líneas y recibió de Lucao para que el ocho se la devolviera al doce, siendo este último el encargado de finalizar sin ver el premio del gol. A los pocos segundos respondió David Pazos con un buen cambio de ritmo por el perfil zurdo que acabó con un disparo demasiado tímido y cruzado.
Lucao quiso echarle el equipo a la espalda desde el inicio y volvió a buscar el uno contra uno a pierna cambiada, pero Matamoros estuvo muy rápido para robarle el esférico y se plantó solo delante de Raúl, que salió a tapar todos los huecos posibles y salvó a los suyos del tanto visitante. Un Raúl que pasado el ecuador realizó otro paradón en otro mano a mano. La desconcentración de la defensa cartagenera era clara y los gallegos estaban siendo mejor sobre el parqué.
Tanto fue así que restando siete y medio para el descanso, Alex Diz se marchó solo por el costado izquierdo y batió a Raúl. Por suerte, poco le duró la alegría a los de negro, que vieron como Bebe ponía el balón con mucho mimo en la escuadra nada más sacar de centro. Tablas en el marcador, aunque sin sacar su mejor versión los pupilos de Duda. Las ocasiones para los de Juanma Marrube seguían llegando y en un saque de esquina, Matamoros recibió y empaló de primeras, teniendo que intervenir de nuevo el gato de Alcantarilla sacando un pie magistral.
La caraja defensiva de Jimbee Cartagena era evidente y cada vez que pasaba Burela a pista contraria, la sensación de peligro era muy clara, sobre todo con los disparos desde la media y larga distancia. Pasado el ecuador, Renato soltó un latigazo desde su casa muchísima potencia, parando Raúl con el pie y dando después el balón en el larguero. Cuando peor estaban los de la Trimilenaria, Solano salió al rescate y con su jugada maestra de giro rápido y disparo, clavó la pelota en la escuadra y puso por delante a los suyos en el electrónico. Ocho minutos por delante para recuperar sensaciones.
A falta de cinco en un fallo de Bebe que estando de último hombre tardó demasiado en chutar, el rebote favoreció a Burela que armó una contra rapidísima y cuando el esférico iba al segundo palo para que la empujasen y empatar, apareció otra vez para sacar otro pie milagroso Raúl Jerez, que sin duda estaba siendo y de largo el MVP del encuentro dando otro recital de intervenciones.
Se había perdido la cuenta de las veces que gracias a sus parados mantuvo por delante a su equipo, y es que cuando solo quedaban un par de minutos para respirar unos minutos, se echó al suelo como un felino y evitó el gol de David Pazos, que se llevó las manos a la cabeza viendo como el murciano lo sacaba todo. Al final de los primeros veinte, dos a uno para un Jimbee Cartagena que no mereció ir por delante y que se fue con ventaja gracias a su guardameta.
El segundo tiempo comenzó con la misma dinámica del primero. Un Burela muy intenso sobre el cuarenta por veinte y un Raúl que esquivó todo lo que le llegaba. Aún así, los meloneros seguían por delante y pudieron aumentar la ventaja en un gran triangulación. Solano recibió de espaldas y la puso a la derecha para Lucao, que vio a Avellino correr hacia el segundo palo y allí la puso. El argentino se estiró y no llegó para hacer el tercero por un pelo. Un tercero que si iba a anotar Marinovic en el veinticuatro para darle un gran respiro a los de la Portuaria.
Cinco minutos más tarde, Renato acortó distancias y colocó el tres a dos con un auténtico golazo desde fuera, pero la alegría les duró lo mismo que al principio de la contienda y los de Duda volvieron a responder con otro golazo, esta vez de Waltinho. Esa respuesta fue doble porque el once hizo doblete en un visto y no visto. La segunda parte era de locura y sin tiempo para celebrar el cinco a dos, Iago Míguez marcó y dio un poco de esperanzas a Burela.
El cinco a cuatro no llegó gracias a que Raúl voló para enviar a córner un auténtico misil de David Pazos. Poco después Avellino la sacó bajo palas y para ponerle la guinda a ese gol salvado in extremis bajo la línea, corrió con todo hacia campo contrario y batió a Edu con un gran disparo raso. El argentino cumpliendo como siempre. Otro que de nuevo se pareció a lo que están acostumbrados a ver en Cartagena es Solano, que se sacó de la chistera otro golazo para hacer doblete.
El siete a cuatro era un marcador aparentemente cómodo pero había que defender mejor. Giasson recortó diferencia en el treinta y ocho y Edu salió para realizar el portero jugador. No fue suficiente para buscar la machada y el marcador se quedó como estaba en un duelo que tuvo una segunda mitad que fue un correcalles durante casi toda su totalidad. Un triunfo para seguir muy arriba en la tabla. La próxima jornada, el 6 de febrero con visita a un sorprendente Antequera.