FOTO: Andy Céspedes / FC Cartagena
Este pasado 18 de julio, el FC Cartagena anunció la contratación de Alfredo Ortuño, prácticamente cerrando a mitad del primer mes de mercado una delantera que tiene una buena cantidad de goles asegurados entre el jugador de Yecla y el siempre cumplidor Rubén Castro, en apenas unas semanas de mercado, la directiva albinegra se había quitado de encima la que posiblemente es la tarea más difícil de solventar en un mercado, la de ariete, por las cifras económicas que suelen mover estos jugadores, y más en los primeros compases de estas ventanas de incorporaciones. Sin embargo, Ortuño venía de pasar un año complicado en Albacete, a pesar de tener un buen rendimiento, el equipo manchego estaban un par de escalones por debajo del nivel general de la categoría y parecían sentenciados al descenso durante buen parte de la campaña.
Aún así, Ortuño se apañó para sumar 7 goles en 37 apariciones. Antes, había vivido uno de sus mejores años en el fútbol profesional, anotando 14 chicharros en el Oviedo, siendo la principal referencia ofensiva de los asturianos. El dato más curioso es que, de los 22 últimos goles que ha anotado Ortuño (si sumamos el de ayer), 7 de ellos han venido del minuto 83′ hacia adelante, en la recta final de los encuentros cuando todo está por decidir, prácticamente un tercio de sus dianas. No es de extrañar, pues es un delantero que siempre sabe qué lugar ocupar en el área, muy intenso y con un tremendo remate de cabeza, como pudimos apreciar ayer en el Cartagonova.
Carrión tiene una difícil pero jugosa papeleta en el ataque albinegro, pues Rubén Castro, Ortuño, Okazaki y el polivalente Mo Dauda se tendrán que repartir los minutos de ‘9’ y segunda punta. Muy mal se tendría que dar para que el Efesé estuviese falto de pólvora o alternativas ofensivas a lo largo de esta camapaña 2021-22.