Decepción inesperada. Un Jimbee Cartagena falto de ideas dijo adiós al sueño copero en una segunda parte para olvidar. Los de Duda resucitaron a Peñíscola y Josiko marcó en el Palacio pidiendo perdón a la grada. Otro batacazo.
Los meloneros comenzaron el duelo con el cuchillo entre los dientes. Era algo lógico, ya que en juego está la clasificación para la Copa de España. Peñíscola salió con la misma intensidad y los primeros minutos, ambos conjuntos presionaron a pista entera la salida de balón.
La primera clara fue para los visitantes. Balón largo del portero en el que Raúl Gómez le ganó la espalda a Cobarro y se plantó solo delante de Raúl, pero el gato de Alcantarilla se sacó de la manga el primer paradón del encuentro. Acto seguido, Fran Fernández chutó desde la derecha y su disparo cruzado se fue rozando el palo.
Habían pasado cinco minutos y medio y el Jimbee estaba siendo mejor. Era una realidad y se confirmó con el primer tanto. El de Abanilla mandó dentro de la red un saque de esquina botado por Attos. Otra vez la pizarra de Duda dando su resultado.
Todo parecía indicar que el segundo de los cartageneros estaba muy cerca, y cuando más entonados y cómodos andaban por la pista, los valencianos empataron faltando once para el paso por vestuarios, Isio batió a Raúl con un zurdazo muy ajustado. Se llegó al ecuador de la primera mitad con tablas en el electrónico.
La contienda se enfrió un poco en cuanto a ocasiones. Los valencianos se cerraron un poco más en defensa y Jimbee Cartagena se dedicó a tener más paciencia con la pelota y a buscar su oportunidad a base de mover rápido la misma. La salida a la contra de Peñíscola generó muchas dudas en los locales y tuvo que ser Raúl el que salvara de nuevo los muebles, con otra parada de las suyas en otro mano a mano con Gómez.
La polémica llegó cuando el luminoso marcaba cuatro minutos y once segundos para el pitido del colegiado. Una mano dentro del área que protestaron los de azul al considerar que era fuera. Lukaian cogió el cuero y lo descosión. La bestia puso de nuevo por delante a los suyos y estuvo muy cerca de hacer doblete, pero Molina le sacó un gran pié. Al intermedio, por delante los meloneros.
Al poco de la reanudación, Cobarro recortó, apuró línea de fondo y puso el balón al segundo palo, con la lástima de que Lukaian no llegó por milímetros. Comenzaron los de Duda de nuevo con muchísima intensidad. Pasaron de nuevo varios minutos sin acercamientos peligrosos y en el 27, a la tercera fue la vencida y Raúl Gómez colocó hizo las tablas.
A partir de la igualada, Peñíscola puso en serios aprietos a los cartageneros y empezó el nerviosismo. Dani Montes dispuso de una clara y tuvo que aparecer San Rául para intervenir de nuevo con otra parada antológica a bocajarro. Restaban nueve y Isi la falló lo infallable cuando estaba solo para empujarla pisando la línea de gol. En la siguiente, Gómez sacó un potente disparo con la zurda que de nuevo detuvo el señor Jerez.
Un señor Jerez que no se cansó de sacar unos contra unos y mantuvo vivo a su equipo en el encuentro. En el otro lado también estaba situado bajo palos un gran portero como Molina, que en la reacción de los de la Trimilenaria, hizo tres intervenciones consecutivas en menos de un minuto.
Se complicaba el asunto y restando cuatro para finalizar, Josiko recibió en el costado izquierdo, sentó a Raúl y puso el dos a tres en el luminoso. Y el jarro de agua helada definitivo se produjo con el dos a cuatro. Adiós a la Copa para los de Duda.