Este mercado invernal, el Efesé adquirió un tercer delantero. Sus otros dos, Sadiku y Ortuño, venían haciendo un buen trabajo y sumando buenas cifras, sin embargo el equipo necesitaba como el comer un perfil diferente de ariete, uno más móvil y asociativo, capaz de conjugarse mejor con los talentosos hombres de la línea de tres cuartos. En una apuesta personal, la directiva optó por Darío Poveda, no esperaron mucho a que se moviese el mercado de delanteros y decidieron apostar por el jugador del Getafe, que en la primera vuelta estuvo cedido en el Ibiza donde las cosas no le salía a ninguno de sus integrantes.
No empezó su etapa como albinegro de la mejor manera, pues se estaba recuperando de una lesión y hubo que esperarle unos días para que empezase a sumar, en ese proceso, Carrión tiró de la variante de Borja Valle como ‘9’, que casó perfectamente, el Efesé empezó a encandenar grandes resultados y, por lo tanto, lo que funciona es difícil tocarlo, de hecho el técnico catalán, cuando empezó a introducir a Poveda, ya lo tuvo que hacer directamente echado a una banda, pues compartía muchos minutos con Ortuño y/o Sadiku. La semana pasada Jairo ya fue baja, y el Efesé necesitaba reformar el ataque, Carrión le dio entrada a Poveda en una posición muy móvil, apareciendo en banda y luego cayendo por dentro, dejando el carril para Calero. Ya tuvo buenas sensaciones en La Cerámica y todo apuntaba que iba a seguir en el once, ahora tras la lesión de Ureña.
Hoy repitió su rol en el once de Luis Carrión, el ataque albinegro es una coctelera que complica al rival que asigne marcas, tan pronto te ves a De Blasis en una banda, como a Borja Valle en otra, como a Jairo y Poveda percutiendo por dentro. Parece haberse sentido cómodo el ex del Ibiza en este rol, que ayer durante la primera parte fue, junto a Datkovic, el hombre más destacado en la cancha. Destapó un gran juego de espaldas, estuvo fino en la asociación e incluso logró 3 ocasiones claras de gol, pero estuvo realmente negado de cara a puerta; primero un balón dentro del área donde imprimió demasiada potencia y lo mandó muy alto, más tarde entendió a la perfección un pase en largo de De Blasis, controló bien pero un defensor rival se le echó encima y le impidió rematar en condiciones y por último, la más clara, un remate desde cerca del área pequeña que salió realmente defectuoso.
No le perdió la cara al partido y siguió insistiendo, en la segunda parte se llevó una ovación de todo el estadio tras un carrerón para abortar una contra rival con éxito. Apenas unos minutos después, Pêpê burlaba a toda la línea defensiva del Lugo con un pase a sus espaldas, Jairo entendía bien el movimiento, dejaba botar el balón el área rival y asistía a Darío Poveda para que este anotase a placer para estrenarse con la elástica albinegra. A los pocos minutos acabó siendo sustituido por Ortuño, ya que lo había dejado todo e iba cargado con una amarilla.
Eteki dio un recital en su primera titularidad en el centro del campo cartagenero