Ayer pasé vergüenza, mucha vergüenza, demasiada, y más teniendo en cuenta que desde los tiempos de Sporto, cuando los jugadores dieron la espalda al palco, no había sentido una sensación igual.
Nuevamente hicimos el ridículo deportivamente un partido más, nuevamente ante un error defensivo en un córner, el equipo se viene abajo y comienza la hecatombe. Pero bueno, en lo deportivo hace semanas que me mentalicé que este año será el de un nuevo descenso y quién sabe si no de algo más duro todavía.
Lo deportivo lo puedo perdonar, me cuesta, pero todo el mundo tiene derecho a errar en una planificación, en este caso en la del primer equipo, en la del filial y en la del división de honor, del equipo femenino no hablo, ya que no ha parecido importar mucho al club en los últimos años, y de ahí la espantada de jugadoras a equipos que hay pasando Corvera y cruzando el Puerto de La Cadena. Pero bueno, quién soy yo para opinar de ello, si sólo soy un mero abonado.
Sentí vergüenza de ver el ambiente que había en la grada, gente discutiendo entre ella. Sí, parece ser que en vez del Efesé, ahora debemos ser pro o anti B&B. Y al igual que no vanaglorio a jugadores desde hace muchos años, no veneraré a ningún dirigente, ya que ellos están de paso y el día que decidan marchar serán olvidados en pocos días o semanas. Pero bueno, quién soy yo para opinar de ello, si sólo soy un mero abonado.
Sentí vergüenza de ver como se coartó la libertad de expresión del aficionado nada más terminar el partido, poniendo la música bien alta, justo tras el pitido final del árbitro y con una rapidez pasmosa. igual pensaban que los que peinamos canas y llevamos ya un poco de calle, no nos íbamos a fijar en el detalle. Gracioso fue ver a algún guardia de seguridad pidiendo que fuéramos saliendo y calmáramos los ánimos.
Por cierto qué gusto da escuchar tan fuerte la música en el Cartagonova, no sabía que se podían generar tantos decibelios. La plataforma contra el ruido de Cartagena, no debe de estar muy contenta con ello.
Eso sí, esto hizo que los ánimos se caldeasen bastante más y la grada también subiera los decibelios, por lo tanto, craso error del o los que dio la orden.
Pero bueno, quién soy yo para opinar de ello, si sólo soy un mero abonado.
A la salida del estadio, mucha gente crispada, y aglutinándose en la puerta que salen los directivos. Esta vez no eran 10 ni 20, esta vez mínimo había 100 o 200 personas, eso depende del ojo del periodista que informe de lo acaecido a la salida. Eso sí, todos fuera de las cabinas de tribuna alta grabando con los móviles. Ya no sé con qué intención, si tener carnaza para atacar a la B&B o atacar nuevamente al aficionado, vete a saber el motivo.
Por cierto el que escribió el artículo “LA IDIOCIA” no grababa nada, que después tiráis a matar por las redes sociales.
El iba como yo, lo siento pero yo ya no me crispo, esto se veía venir desde hace tiempo. No pienso tomar un disgusto este año por el fútbol, eso sí, para los próximos partidos la bufanda en casa, la boca cerrada y a comer pipas. Porque como mero abonado, quien soy yo para tener que animar y no comer pipas, eso es solo para los PRO, yo me quedaré en come pipas por decisión propia.
Llego a casa y decido instalar, reinstalar, Twitter y ver qué se cuece en las RRSS, craso error, empiezo a leer cosas que han sucedido en la grada y siento más vergüenza aún. Pero bueno, quién soy yo para opinar de ello, si sólo soy un mero abonado.
Duermo plácidamente y a pata suelta, pues repito, este año disgustos cero, y venta de motos no compro ni una más. Cada uno que lo padezca como le plazca. No es mi empresa, por lo tanto ni voy a pedir la cabeza de los dirigentes, ni su continuidad, solo pediría que salgan a dar explicaciones de una vez por todas, si lo ven necesario, yo sí lo veo muy necesario, pero claro, solo soy un simple y mero abonado, así que, quién narices soy yo para pedir explicaciones, o tener la osadía de opinar sobre ello.
Quedan siete largos meses de temporada, y se pueden hacer larguísimos si se adopta la técnica del avestruz. Pero bueno, quién soy yo para opinar de ello, si solo soy un mero abonado.
Es por todo esto y por cosas que han pasado desde que subimos a Segunda, que tengo la sensación que como aficionado solo me quieren en la época que hay que pagar los abonos y una vez hecho el desembolso económico pasamos a ser meros abonados, pero QUÉ COÑO DIGO, perdón por este pensamiento en voz alta que he tenido, quién soy yo para opinar de ello, si solo soy un mero abonado.
Artículo publicado por J. Moreno, abonado del club, como butaca libre.
Artículos sin nombre, demuestran un poco de cobardia
El artículo es opinión de un aficionado. Ya está puesto su nombre.