Uno de los jugadores que más ganas tenía la hinchada albinegra de ver esta campaña era el extremo Franchu Feuillassier. El argentino fue una apuesta de la directiva, venía de una lesión grave con el Eibar pero su talento y capacidades eran de sobra conocidos, sin embargo unas molestias en el tobillo que se han ido alargando más de lo esperado han ido frenando sus intervenciones con la elástica albinegra, apenas le hemos podido ir viendo ocasionalmente en tramos de 20-30 minutos en partidos sueltos. Ayer logró sumar hasta un total de 42 minutos, sustituyendo al sueco Isak Jansson, que no tuvo su mejor día. No veíamos jugar tanto al argentino desde el 26 de agosto, más de 2 meses atrás, donde el Cartagena recibió al Zaragoza.
Ayer entró en el 55′ y el Cartagonova le recibió con ese ‘picorcito’ como si fuese un jugador que debutase, con ansias de poder ver su nivel real, pues precisamente lo que más está echando de menos esta campaña la escuadra de Carrión es un extremo distinto, que encare, que sea ganador en uno contra uno y que pueda finalizar jugadas. Tuvo una actuación aceptable, se asoció con éxito en 9 de sus 13 pases, buscó dos centros pero ambos fueron despejados por la defensa rival, ganó 4 de los 7 duelos que disputó por la pelota, perdió 5 balones y recuperó 3. Lo más rescatable de su actuación es que pudimos verle haciendo justamente lo que necesitaba el equipo, encarar y tratar de superar rivales, en 42 minutos buscó hasta en 5 ocasiones el uno contra uno, lográndolo en 3 acciones; para ponerlo en perspectiva, si lo comparamos con otros jugadores en este partido, Borja Valle lo consiguió otras 2 de 4 intentos en 88 minutos, Jansson 0 de 1 en 57′, Jaime Romero 1 de 3 en 11′, Jairo 4 de 4 en 88′, Callejón 2 de 2 en 99′, Antonio Puertas 1 de 2 en 68′ y Bryan Zaragoza 1 de 3 en 18′.
En la parte negativa, obviamente se le vio un escalón más bajo de ritmo competitivo que compañeros y rivales, se vio en varias carreras donde el Granada salía al ataque y Franchu iba a marchas forzadas, en el 65′, apenas 10 minutos después de entrar tuvo que cortar una contra viendo tarjeta amarilla, y pocos minutos más tarde tuvo una acción calcada donde tuvo que frenarse para evitar ver otra cartulina, permitiendo que los rivales avanzasen metros. Es vital que Franchu acabe recuperando sus sensaciones para dar ese impulso que necesitan las alas del Efesé, especialmente si sigue insistiendo en explotar sus mejores características como pudimos ver ayer.