Los números no engañan. Todo estaba de cara pero la situación ha dado un giro, un triste giro. Jimbee Cartagena está obligado a ganar mañana a Peñíscola para acercarse a Aspil Vidal. Una victoria ante los valencianos colocaría a los meloneros por delante de estos. El Palacio será una olla a presión.
Toca remontar de nuevo el vuelo. Tras la dolorosa derrota en Paterna el pasado sábado y más de la forma de la que se produjo, la plantilla acabó muy afectada. Parecía que el partido estaba controlado y el objetivo un poco más cerca, cuando de repente, llegó el jarro de agua helada. Pero hay un dicho muy famoso que dice «mientras hay vida, hay esperanza», y a eso se tiene que agarrar el conjunto cartagenero. Quedan cinco balas en el cartucho, y la primera será mañana (17:00) en el Palacio. Otra prueba de fuego frente a un rival complicadísimo.
Peñíscola llegará a Cartagena con la idea de distanciarse cada vez más de los meloneros. Los de André son décimos con treinta y un puntos, a tan solo dos de los valencianos, que se sitúan en la novena plaza con treinta y tres. Ahora mismo, Aspil Vidal cierra el playoff, afianzándose en el octavo puesto con treinta y seis. Los de Tudela se enfrentarán esta tarde a Antequera en tierras malagueñas. Si los de Pato hacen los deberes y los de la Trimilenaria no suman los tres puntos, las cosas se pondrían muy cuesta arriba.
Además, un tercer pinchazo consecutivo dejaría muy mermado al cuadro de la ciudad Departamental. Las opciones siguen encima de la mesa y Brocanelo y sus pupilos ya han olvidado lo pasado y solo están centrados en ganar mañana. Aún así, el míster valoraba en rueda de prensa esos dos batacazos consecutivos. «Son muchas etapas. Hemos perdido dos oportunidades muy buenas y contra Levante planteamos un muy buen partido que perdimos por errores individuales. Ahora no dependemos de nosotros mismos y tenemos que hacer los deberes y esperar fallos de Aspil. Si no ganamos mañana, solo nos queda un diez por ciento de opciones».
Peñíscola llega también herido. Suman un mes sin conocer la victoria y hay que aprovechar la dinámica negativa que atraviesan. Andre sabe del potencial que tienen y lo reafirmó. «Tienen un gran equipo y están haciendo un buen trabajo desde el principio. La baja de Juan Emilio ha sido muy dura para ellos porque era su referente. Va a ser un duelo complicado. Presionan muy bien y voy a necesitar la mejor versión de los míos».
Llegan los momentos devisivos y la afición quiere ver como los hombres clave de la plantilla tiran del carro, como por ejemplo Batería. Un Batería que ayer recibió una gran noticia, y es que ha vuelto a ser convocado con su selección. No cabe duda de que esto es una inyección de moral y veremos su mejor versión. Para más alegría, no hay ninguna baja, una noticia que hace respirar a la afición. Una afición que tendrá que estar muy presente. El palacio tiene que rugir.
A pesar del mal momento de los de Juanlu Alonso, se han producido tres renovaciones de pilares fundamentales del club. Xavi Cols, Hugo y el capitán Rubén Orzáez, seguirán defendiendo la elástica peñiscolana una campaña más. A esto se le suma que Claudino también ha sido convocado con Argentina para los dos próximos compromisos frente a Italia y Bosnia, los días 14 y 16 de abril.
Son noticias muy positivas, pero lo importante es saltar a la pista y sumar de tres en tres, algo que no han conseguido en el últimos mes y la ansiedad es cada vez mayor. Saltarán al parqué del Palacio con toda la artillería, por lo que no cabe ninguna duda que se verá una batalla a vida o muerte, un duelo a cara de perro. El playoff está en juego.