Es día de derbi, es mañana de dejarse la garganta y que Cartagena ruja como nunca. El honor está en juego y los tres puntos no se pueden escapar del Palacio. La afición se merece una victoria en el día más esperado del año por los amantes del fútbol sala en la ciudad portuaria. Mañana, a las 12:00 horas, comenzará el espectáculo.
Toca levantar cabeza y seguir luchando hasta el final. Las cosas no han salido como se esperaban y los meloneros se han quedado sin opciones de jugar el playoff por el título. Aquella victoria en el Palau Blaugrana pareció ser el principio de algo mágico, pero el conjunto cartagenero ha acabado estrellándose con la realidad a base de varapalos. A pesar de todo, nadie ha bajado los brazos y los pupilos de André quieren brindarle a su afición una victoria en el derbi. Una alegría que olvidaría por momentos lo ocurrido jornadas atrás.
Es algo muy complicado afrontar un derbi sabiendo que el objetivo se ha escapado por completo, pero lo positivo de esta situación es que los locales saldrán con menos presión que el eterno rival, unos pimentoneros que no cesarán en su intento de quedar campeones de liga regular, un premio por lo que están luchando de tu a tu con Inter Movistar y Barcelona, estando a tan solo tres puntos de los azulgrana.
Las dinámicas de ambas escuadras son totalmente opuestas. Los de Brocanelo vuelven a casa tras empatar a tres en La Salobreja. Un punto que hizo a los de la Trimilenaria bajarse de la nube y dejar de soñar por un lugar entre los ocho primeros. Solo han sumado dos puntos de los últimos doce en juego y así es imposible. Actualmente, los cartageneros ocupan el décimo lugar en la clasificación con treinta y tres puntos, lejos de los treinta y nuevo de Levante, situados octavos.
Los charcuteros llegan al Palacio con al moral con las nubes tras superar por cuatro a uno a Zaragoza la semana pasada. Saben que pueden darle la estocada definitiva a su eterno rival e irán a por ello.
Será el segundo derbi que se dispute en el nuevo Palacio de los deportes de Cartagena. La campaña pasada, los meloneros lograron una remontada heroica a base de coraje y corazón. El Pozo se marchó cero a tres al descanso y pareció tenerlo todo hecho. No fue así y los de la Departamental acabaron logrando las tablas en tres minutos para no olvidar nunca. Eso fue el año pasado. Este año, en el encuentro de ida, los de Giustozzi se llevaron el gato al agua en un duelo igualadísimo en el que a los cartageneros les faltó un pelín de suerte.
Cuarenta y tres enfrentamientos se han producido entre meloneros y charcuteros hasta la fecha, saliendo los visitantes victoriosos en veintiocho ocasiones. Jimbee ha ganado ocho veces y las tablas se han dado en siete ocasiones. Con la batalla de mañana serán cuarenta y cuatro veces.
Jimbee Cartagena tiene la duda hasta última hora de Raúl Canto. El cierre murciano sufrió recientemente un esguince leve en su tobillo izquierdo y si llega, será entre algodones. Las bajas del Pozo Murcia serán Pito por molestias en su gemelo derecho y Matteus por su expulsión frente a los maños.
Giustozzi todavía no sabe lo que es vivir un derbi regional y será su primera vez, algo que comentó en sus declaraciones previas. «Aún no tengo esa sensación de derbi. Me dijeron que es mucho más picante allí. Me gustan este tipo de partidos y solo pienso en ganar y acabar primeros».
El técnico campeón del mundo con Argentina avisó que será un partido muy igualado. «Tienen grandes jugadores. La motivación es muy alta para todos y tenemos que estar concentrados al máximo. Trataremos de seguir la línea que llevamos desde el inicio de liga».