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No, no vengo a molestarte
Pero quería acercarme
Por si hoy había explicación
No, no vengo a molestar, nos acercamos, pero no vamos a encontrar una explicación. No había explicación a que un equipo gane uno de diecisiete partidos hasta diciembre, que sólo haga quince puntos en la primera vuelta de todo un campeonato de liga en la Segunda División Española.
Dos millones de horas en trance
Seis gritos, cuatro romances
Pero ninguna razón
No sé si fueron dos millones de horas, pero sí fueron siete partidos seguidos perdiendo en nuestro propio estadio (los siete primeros jugados en nuestra casa…) gritos fueron más, pero pitos o reproches por nuestra parte, ninguno. No, no había ninguna razón para creer, aún así ahí seguimos, en trance, sin ninguna razón, asistiendo a desastre tras desastre, sin ninguna razón.
Yo sigo llegando tarde
Se me hace largo el viaje
Para esta conversación
Largo, muy largo se nos está haciendo este viaje de temporada a los efesistas, pero aún tenemos tiempo para no llegar tarde, y ahora es cuando toca. Y como lo de conversar sólo podemos hacerlo con Julián Calero, entrenador y todo del Club, supongo que a nosotros nos toca gritar. Tarde llegó la primera victoria en casa, tan tarde como en la jornada 18, demasiado largo el viaje. Tan largo que sólo queremos que acabe ya.
No quisiera molestarte
Pero quería gritarte
¡Me duele el pecho de amor!
Tiene que haber una salida
Tiene que haber una salida
Tiene que haber una para tanto dolor
No queremos, pero si molestamos, seguramente porque hemos querido gritar alguna vez. Tenía que haberla, pero no lo parecía, que tanto dolor no era reversible, y que esa salida, no existía. Hubo un momento que muchos no la vimos. Tenía que haberla, tenía que haberla, tenía que haberla. La hemos encontrado, ahora toca atravesarla.
Y ahora sé que la salvación
Estaba dentro de un beso
Y una caricia en el pelo
Y aquella noche en el espigón
Y ahora sabemos que la salvación estaba dentro de nosotros, de una plantilla a la que a la mayoría le dolió en su orgullo profesional, en Julián Calero y en no rendirse, en juntarse atrás y en los bocadillos de mortadela. Y aquella noche en Valencia, y aquella noche en Gijón.
Yo quisiera ser cobarde
Pero he elegido hablarte
Y todo pesa un millón
No hay en Cartagonova 9.000 cobardes, porque elegimos hablarte. Todo pesaba un millón, cada derrota, cada gol en contra en el descuento, cada fallo infame de nuestros jugadores, cada minuto en el campo de algunos que si quisieron ser cobardes. Otros, eligieron hablarnos, y compartir el peso, que llegó a ser de más de un millón. Pero no quisimos ser cobardes.
No, no quiero nada de nadie
Pero quería gritarte
¡Me duele el pecho de amor!
Gritar, Gritar, y Gritar. No queremos nada de nadie, porque lo que tenemos es nuestro. Gritar, ¡Nos duele el efesé de amor!. Queremos gritar, y cantar, porque es lo único que podemos hacer para que deje de doler.
Tiene que haber una salida
Tiene que haber una salida
Tiene que haber una para tanto dolor
Hay una salida, hay una salida, hay una salida. Tanto dolor tenía que terminar. Y va acabar, tenemos esa salida cerca, ahí mismo. En dos semanas, cruzando el puente hay una salida.
Y ahora sé que la salvación
Estaba dentro de un beso
Y una caricia en el pelo
Y aquella noche en el espigón
Y ahora sabemos que la salvación estaba en unos cuantos jugadores de la segunda, y en un profesional que vino y nos enseñó dónde estaba la salida y cómo había que alcanzarla, un señor que nos dijo que había que creer. Y en aquella noche en Elche, y en esta de Alcorcón.
La salvación de tantos dioses modernos
No me compensa el momento
De haber tenido que decir adiós
Los futbolistas; esos dioses modernos que han sido algunos, otros sólo se lo creen. Esta salvación los incluye a ellos y a los que con cada carrera y cada disputa nos han compensado los momentos de desgana y desidia previos. Para llegar a esto, afortunadamente en algunos casos hemos tenido que decir adiós, pero a nosotros sí nos ha compensado ese momento. A nosotros y los jugadores que si quisieron ser dioses modernos en Cartagena viniendo a ayudar a encontrar una salida.
Tiene que haber una salida
Tiene que haber una salida
Tiene que haber una salida
Tiene que haber una salida
Tiene que haber una salida
Tiene que haber una para tanto dolor
Salvación
Salvación
Salvación
Ganar al Alcorcón.
Salvación
Salvación
Salvación
