Algunos aficionados del Cartagena tuvieron que estar más de 30 minutos en fila para poder entrar a ver el partido.
En todas las puertas del estadio se formaron retenciones, con solo dos tornos de entrada, el ritmo era muy lento y muchos efesistas entraron tarde pese a llegar con tiempo de antelación.
Además, en un día en el que el sol fue protagonista, con temperaturas que rondaron los 30 grados, el agua y las gorras se acabaron enseguida y no todos los aficionados tuvieron la oportunidad de poder apaciguar el calor, ya que no había forma de poder conseguir más agua para refrescarse una vez dentro del estadio.
Con 5108 espectadores en las gradas, una cifra baja para lo que se espera en los próximos partidos, la previsión no fue adecuada y hubo cierta indignación por parte de los seguidores albinegros.
Pues yo estuve muy tranquilo en la cola llegue 20 minutos antes, que queremos, que aparte de agua, cosa que no he visto decir, que nos den un paraguas.