A finales del siglo XV, el puerto de Cartagena, tras diferentes crisis internas castellanas, guerras civiles, enfrentamientos con los reinos de Aragón y Granada e incluso la piratería, empezó a tomar protagonismo y desarrollo. Se trasformó en un puerto franco y su influencia tanto en número de embarcaciones como de comercio creció considerablemente.
Haciendo un simil con nuestro FC Cartagena. Después de una época convulsa, crisis ecónomicas, batallas perdidas e incluso la piratería, se ha dado un crecimiento año tras año hasta llegar a una era dorada en lo futbolistico. El Cartagonova se ha trasformado en una fortaleza y el número de seguidores y el ambiente ha aumentado.
Además, tomando como referencia la frase de Andrea Doria (1466-1560) «No hay navegación más segura que julio, agosto y el puerto de Cartagena», donde elogia la seguridad que la propia naturaleza otorga a la ensenada de Cartagena. Hoy en día, nuestro equipo refleja esa tranquilidad de nuestra mar. La gente acude a nuestro estadio con la misma certeza y convicción de la que nuestros antepasados partían por nuestra bahía.
Y es que los hombres de Luis Carrión se han ganado la confianza de los efesistas y como nuestro puerto son un orgullo de nuestra trimilenaria. Ese trabajo y solidaridad son lo que los seguidores quieren contemplar. Esa humildad y ambición son lo que los aficionados quieren apreciar. Ese esfuerzo, sudor y lágrimas son lo que los albinegros quieren acompañar.
Y es que, como con la elegancia del paisaje de nuestros dos faros cuando amanece, el equipo está sabiendo salir al campo. Plasmando el sentir de la muy noble, leal y siempre heróica Cartagena.