FOTO: Andy Céspedes – FC CARTAGENA
Una de las notas más llamativas del Amorebieta 2 – 3 FC Cartagena fue la inclusión en el once de David Simón. El canario, que vive su segunda campaña con los albinegros, no había debutado aún tras 9 jornadas de competición. Desde enero de 2021, se encuentra en una posición complicada en la plantilla, pues el club cuenta hasta con 3 laterales derechos en sus filas y el alto rendimiento de Julián Delmás condenó prácticamente al ostracismo tanto a David Simón como a Antoñito. El Efesé oteó prescindir del ex del Deportivo este verano, pero finalmente optó por conservarlo y que aportase competencia al perfil diestro y una alternativa al carril zurdo, donde jugó algunos encuentros en el mencionado club gallego.
Lo que nadie esperaba es que tuviese que acabar jugando de central. Luis Carrión volvió a demostrar que no le tiembla el pulso para alinear a jugadores que cuentan con menos oportunidades, y le seleccionó para el central diestro para así poder dar continuidad al sistema de 3 zagueros y 2 carrileros que tan bien funcionó en el 5-1 al Ibiza. Este encuentro fue totalmente diferente al del Cartagonova, los cartageneros fueron mucho más exigidos por un Amorebieta que a través de juego directo atacaba sin cesar, además de que el canario, desde la posición de central, tuvo que brindar ayudas constantes a Delmás, pues los vascos abusaban de la insistencia por bandas para colgar balones laterales.
Tuvo una correcta actuación, contando que su última participación en partido oficial fue el 12 de marzo (entró en el descuento de la jornada 42 ante el Girona, pero obviamente su presencia fue testimonial) y además en una posición inédita para él a pesar de sus 32 años. En el apartado estadístico, su eficacia en el pase rondó el 75% de acierto y ganó prácticamente la mitad de sus duelos, a pesar de la dura exigencia del conjunto vasco. Completó los 90+ minutos.
Pero sin duda, la nota más dulce para el canario, fue en la jugada del 2-3 decisivo para la victoria. Corría el minuto 91, David Simón salió de la cueva con rapidez para arrebatar la bola a un rival que quería retener la pelota de espaldas, el reconvertido a central forzó la pérdida de balón y allí el Efesé empezó a cocinar el gol del éxtasis para la ciudad de Cartagena, Delmás sacó de banda, Ortuño hizo magia y mandó un taconazo sensacional al espacio para que Gallar se quedase sólo ante el portero para asegurar los 3 puntos.