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La magnífica temporada 22/23 ha permitido llegar al FC Cartagena a una nueva recta final de liga donde están compitiendo por intentar colarse en los PlayOffs de Ascenso a Primera División. Este pasado sábado, el Efesé se veía las caras con el otro invitado sorpresa a los cupos de privilegio, el Albacete Balompié, en su Carlos Belmonte. Dos equipos valientes, que han rentabilizado cada euro gastado y que portan un fútbol ofensivo como bandera se veían las caras en lo que prometía ser un partido de ida y vuelta constante.
Un inicio igualado. Carrión optó por dar continuidad al once que venía de ganar al Sporting. El técnico albinegro ya avisaba en rueda de prensa de la debilidad defensiva que había detectado en el club manchego a la hora de defender los centros laterales, de ahí la continuidad de Ortuño en el once, que además, venía de marcar gol. El inicio fue igualado, el Efesé tenía algo más la bola e incluso en el primer ataque del partido lograba crear un problema al Alba, que no defendió bien pero tuvo suerte con la mala finalización albinegra. Sin embargo, los de Rubén Albés no dejaban de dar guerra, salían rápido en transición guiados por un espectacular Manu Fuster y en cuestión de 2 o 3 pases entre sus hombres de ataque se plantaban en las inmediaciones del área de Escandell, pero sin resolver de la mejor forma.
Expulsión de Djetei y mala gestión con uno más. Ya en el minuto 17′, Djetei ganaba a Pêpê con mucha agresividad un duelo por la pelota y los manchegos montaban una de estas tremendas contras en cuestión de 4 toques de pelota acabando en gol, sin embargo el árbitro era llamado rápidamente a revisar la acción, anulaba el tanto y mostraba una justa roja a Djetei, que fue con todo abajo y rebanó el tobillo del mediocentro portugués, cuando dos jugadores chocan así frontalmente, estas acciones siempre acaban con expulsión. Parecía que todo se le ponía de cara al Efesé, sin embargo los de Carrión pecaron de ansiosos, querían llegar de un área a otra sin madurar las jugadas a pesar de que quedaban 70 minutos de partido; Calero, Alcalá, Datkovic, Martos, Jairo, Pêpe, Musto y Poveda perdieron multitud de balones, gran parte de ellos en campo propio, por intentar apresurarse en la salida para aprovechar en cuanto antes la superioridad. Incluso intentaban buscar a Ortuño con balones al espacio en lo que suponían carreras de más de 40 metros al ariete yeclano. La retransmisión de TV incluso captó a Marc Martínez saliendo del banquillo a pegar gritos a sus compañeros para que se relajasen. Se llegó al descanso abajo, 1-0 y con pavor porque el Albacete, aún con uno menos, no dejaba de morder y llegar.
El Efesé se cargó de tarjetas. La expulsión de Djetei prendió al Carlos Belmonte, que como cualquier estadio, se cabreó cuando no están de acuerdo con una decisión arbitral. Desde entonces, en esa primera mitad, los jugadores albaceteños, aprovechando el ambiente, buscaron cargar con amarillas al Cartagena, lo consiguieron con Jairo y Musto, correctamente amonestados en acciones a las que llegan tarde, pero también con Datkovic, que ganó un salto limpiamente. La amarilla al pivote del Efesé fue notoria, los jugadores del Albacete sabían de su sangre caliente y le buscaron, tanto física como verbalmente, buscando su doble amarilla.
Tres cambios al descanso, revolución. El cuerpo técnico albinegro decidió darle un lavado de cara al equipo en el descanso; se marcharon Jairo, Musto (amonestados) y Alcalá. Entraron Olivas, Ferreiro y Valle.
Mayor claridad tras descanso. Los cambios, y que el Albacete estaba obligado a ser cauto con uno menos, mejoraron al Efesé, mucho más tranquilo, ordenado, saliendo y llegando más pausadamente. Los centros laterales hicieron temblar un poco a la zaga manchega, que siempre despejaba a córner para evitar problemas.
Jugadores sin gasolina. Hay futbolistas del Efesé que llevan una carga de minutos brutal esta campaña; 2 de ellos están en el top5 de toda La Liga SmartBank, De Blasis (2º, 3.723 minutos) y Calero (5º, 3.558 minutos) además de Jairo (60º, 2.903 minutos). Todos ellos han realizado una temporada sensacional, dejándose el alma y el físico por el Efesé, sin embargo están notando la carga de minutos en esta recta final, dejando aparte del caso de De Blasis (que, si bien estuvo lejos de su mejor partido, tampoco estuvo mal), los casos de Calero y Jairo fueron preocupantes, muy lejos de ser los aviones que han sido en otros momentos del curso.
Llegó el empate. En el minuto 55′, el recién entrado David Ferreiro encontró a Darío Poveda en el balcón del área, el atacante encaró y superó a un central rival para anotar el 1-1 y el que es su tercer tanto desde que llegó a Cartagena (mejorando a otros fichajes invernales como los de Weissman, Karrikaburu, Castel, Loren o Arana). El Efesé tenía tiempo de sobra para ganar el partido.
Se abusó del centro, por la supuesta debilidad defensiva del Alba en este aspecto. Los datos y la hemeroteca están ahí; El Efesé produce en torno al 60% de sus goles a raíz de centros laterales y, una de las mayores debilidades del Albacete era su defensa de este tipo de jugada. Así se vio en los primeros minutos de la segunda parte, donde el acoso efesista se manifestó de esta manera, el Albacete siempre despejaba como podía, devolviendo de nuevo la pelota al Cartagena o regalando córners en situaciones que se podían haber solucionado con más contundencia. Pasaron los minutos y los albinegros insistieron, insistieron e insistieron en el que era su Plan A, B y C. ¿Habría que haber optado por otra idea distinta? Nunca lo sabremos, pero la ofensiva repetida del Efesé no fue al azar ni era por falta de ideas, las intenciones y los motivos estaban claros. El apunte negativo; posiblemente Ortuño habría tenido una mejor actuación entrando como revulsivo con los centrales cansados que intentando rematar balones tras más de 60′ de brega poco fructífera.
San Aarón Escandell y final con 1-1. No se pudo completar la remontada, el Efesé dominaba la pelota, intentaba llegar al segundo tanto a base de centros laterales pero el Alba seguía vivo a la contra con un Cartagena muy partido y mal balanceado. En una situación así, donde el equipo se desequilibró por completo, Escandell tuvo que hacer un paradón vital para mantener el empate. En los últimos instantes, Mikel Rico remató de cabeza una pelota colgada desde balón parado, pero tocó en un rival y se marchó por muyyy poquito a córner.
Queda mucho, muchísimo por disputar en los 4 últimos partidos. Pocos firmarían el empate antes de empezar, mucho menos tras la expulsión, quizá que el Efesé no aprovechase la superioridad numérica empañó un poco el resultado, pero los cartageneros prácticamente se habrían despedido de sus opciones si el Alba se llega a quedar los 3. El Cartagena seguirá a dos puntos, ganó el importantísimo goalaverage y ahora tendrá que ganar y esperar un fallo de los manchegos. El Albacete no pudo salir tan ganador del partido como habrían deseado, delante de su gente no lograron sentenciar prácticamente la plaza y además tendrán 3 bajas sensibles para su siguiente partido en Ibiza (descendido este finde), no estarán Boyomo, Djetei ni Juanma. 4 minutos en un partido de fútbol, son un mundo, pues imagináos 4 partidos. Puede pasar de todo, desde que el Albacete pierda los dos siguientes partidos (Ibiza y Alavés) y el Efesé empate sus dos siguientes (Burgos y Zaragoza) y ya le sirva para pasar a la 6ª plaza, o que el Burgos asalte el Cartagonova y prácticamente se agoten las opciones albinegras. Así que cabeza alta, a convertir nuevamente el Cartagonova en una olla a presión y a sumar el máximo de puntos posibles en los +360 minutazos que quedan por disputarse en esta Liga Regular 22/23.
